TAMBIEN RENUNCIARIA

Si un día alguien me dijera oye, ven a trabajar conmigo, tienes que administrar y que las cosas funcionen adecuadamente, obtén buenos resultados y por eso te daré una buena compensación, ni tonto diría acepto y hago lo necesario para rendir lo que me piden, pero si a poco andar mi jefe me empieza a decir sabes que vamos a cambiar de giro o vamos a ser innovadores con los sistemas para ser más eficientes… hasta ahí no habría problemas, pero si empiezan a decir sabes tenemos que salvar a tal o cual dentro del sistema, pero es unilateral y no vamos a tener forma de cobrar o es muy incierto que alguna vez nos den el total de lo adeudado, algo así como la deuda histórica del banco de chile cuando fue intervenido en la crisis de los ochenta, entonces no queda otra cosa más que definitivamente dar un paso al lado y dejar que otros destosen lo que ha costado años realizar, por eso si hubiese sido el presidente del metro, también habría renunciado al directorio, más cuando me están pidiendo que salve un sistema que nació con problemas, tiene problemas y definitivamente los seguirá teniendo.

Hoy en día nos enfrentamos a la destrucción de imagén de una institución digna como lo era el Metro de Santiago, que de ser una empresa reconocida por el servicio y calidad de este paso a ser una empresa con muchas y variadas falencias que traen como consecuencia que hoy el metro no sea mejor que las micros del chansantiago.

Analizando el tema veo que antes el metro tenía las siguientes cualidades:

1.- rápido
2.- seguro
3.- eficiente
4.- cómodo
5.- puntual

Hoy en cambio el metro esta así:

1.- lento, los traslados ya no son lo de antes, pensando que tomaba en estación las rejas a las 9:00 y llegaba a tobalaba a las 9:35, ya sea en la mañana o por la tarde con el mismo intervalo de tiempo, hoy los tiempos han aumentado ya sea porque el tren se detiene en el túnel, se detiene más del tiempo esperado en cada estación simplemente porque ya no anda a la velocidad de antes.
2.- la seguridad es parte del pasado, el que aumentará la señalética no es signo de mejor comunicación, más bien es porque la gente no esta comportándose debidamente y porque los espacios públicos se mantuvieron mientras que los usuarios se triplicaron, ante esto y dado que se han achicado estos espacios, también se han multiplicado los aprovechadores, oportunistas y degenerados, lamentable que el metro haya servido para sacar lo feo de algunas personas en contra de otras.
3.- la eficiencia ya no es parte del concepto metro, hoy no podemos sentirnos seguros de que al subir llegaremos a tiempo o sin contratiempos en el viaje, antes las emergencias por emergencia eran poco o nada comunes, hoy a diario se aprietan las palancas con el consiguiente trastorno del sistema.
4.- de comodidad ni hablar, se eliminaron asientos y la ocupación por metro cuadrado es al máximo 6 o 6,5 personas por metro cuadrado
Y 5.- ya no existe puntualidad, los trenes pasan cuando quieren o mejor dicho cuando pueden, hasta antes del chansantiago en los andenes señalaban que faltaba un minuto cuarenta o cuarenta y cinco para el próximo tren, hoy eso sería una burla…

En definitiva ante este panorama yo también renuncio al Metro…